Las máquinas de medición coordinada, o MMC, son herramientas de medición de alta precisión que se utilizan para medir las dimensiones físicas de un objeto. Una MMC consta de tres ejes individuales que pueden girar y moverse en diferentes direcciones para medir las coordenadas de un objeto. La precisión de una MMC es fundamental, por lo que los fabricantes suelen construirla con materiales como granito, aluminio o hierro fundido para garantizar la estabilidad y la rigidez necesarias para realizar mediciones precisas.
En el mundo de las CMM, el granito es uno de los materiales más comunes para la base de la máquina. Esto se debe a su excepcional estabilidad y rigidez, esenciales para la medición de precisión. El uso del granito en la construcción de CMM se remonta a mediados del siglo XX, cuando surgió esta tecnología.
Sin embargo, no todas las CMM utilizan granito como base. Algunos modelos y marcas pueden utilizar otros materiales como hierro fundido, aluminio o materiales compuestos. No obstante, el granito sigue siendo una opción muy popular entre los fabricantes debido a sus propiedades superiores. De hecho, es tan común que la mayoría considera su uso como estándar en la industria de las CMM.
Uno de los factores más importantes que convierte al granito en un material excelente para la construcción de bases de MMC es su resistencia a los cambios de temperatura. A diferencia de otros materiales, el granito presenta tasas de expansión térmica muy bajas, lo que lo hace resistente a los cambios de temperatura. Esta propiedad es esencial para las MMC, ya que cualquier cambio de temperatura puede afectar la precisión de la máquina. Esta capacidad es especialmente crucial al trabajar con mediciones de alta precisión de componentes pequeños, como los utilizados en las industrias aeroespacial, automotriz y médica.
Otra propiedad que hace que el granito sea ideal para su uso en MMC es su peso. El granito es una roca densa que ofrece una excelente estabilidad sin necesidad de soportes ni arriostramientos adicionales. Por lo tanto, una MMC de granito puede soportar vibraciones durante el proceso de medición sin afectar la precisión de las mediciones. Esto es especialmente importante al medir piezas con tolerancias extremadamente ajustadas.
Además, el granito es impermeable a la mayoría de los productos químicos, aceites y otras sustancias industriales. El material no se corroe, oxida ni decolora, lo que facilita su mantenimiento. Esto es importante en entornos industriales que requieren limpieza o descontaminación frecuentes por motivos sanitarios.
En conclusión, el uso de granito como material base en las CMM es una práctica común y popular en la industria. El granito ofrece una excelente combinación de estabilidad, rigidez e inmunidad a los cambios de temperatura, esenciales para la medición precisa de componentes industriales. Si bien otros materiales como el hierro fundido o el aluminio pueden servir como base para las CMM, sus propiedades inherentes lo convierten en la opción preferida. A medida que la tecnología avanza, se espera que el uso del granito en las CMM se mantenga como un material dominante debido a sus propiedades superiores.
Hora de publicación: 22 de marzo de 2024